SANTO DOMINGO-La Academia Regional Penitenciaria (ARP) recomendó a las autoridades dominicanas intervenir de forma temporal todas las cárceles del país, en especial La Victoria, a fin de evitar la propagación del coronavirus en esos centros.
El director de la entidad, Roberto Santana, dijo en una comunicación que las intervenciones deben ejecutarse con cuatro equipos: uno de administración y logística, otro de médicos y paramédicos y otro de trabajadores sociales para lidiar con la relación entre los internos y los familiares y la comunidad. El cuarto es uno mixto de vigilancia y seguridad, que tenga circulación ambulatoria restringida para evitar ser contagiado en la comunidad.
Con prontitud. En lo que respecta a la cárcel La Victoria, Santana indicó que la falta de una intervención institucional oportuna en esa prisión puede agregar, en breve plazo, un nivel indeterminado de infestación del recinto, producto del desorden e ingobernabilidad existentes.
Agregó que eso provocaría una expansión descontrolada del virus en su interior y hacia el exterior, así como intentos de fuga, que en caso de haber contagios degeneraría en una probable letalidad de magnitud indeterminada.
Atención a La Victoria. Santana señaló que la primera atención es hacia la Penitenciaría de La Victoria por la cantidad de reclusos en sobrepoblación y hacimiento, por el desorden que la ha caracterizado y por la corrupción que impide el cumplimiento fiel de las funciones elementales.
“Precisamente por esas características La Victoria es la prisión dominicana donde primero ha llegado y se expande el coronavirus originando un primer motín, lo que confirma el estado de esa masa humana de cerca de nueve mil personas, procedentes (junto a sus visitantes) de todo los rincones del país”.
Manifestó que esas recomendaciones son extensivas a las 18 prisiones tradicionales del país pues en ellas existen, en distintos grados, los mismos males de La Victoria, tal como lo confirma el contagio reciente en la cárcel pública de San Francisco de Macorís.
Tarjetas de alimentación. Pero además de eso, la ARP recomienda otorgar a los reclusos pobres tarjetas de alimentación de los programas sociales por seis meses, aporte que alivia la economía y restringe la circulación de las familias que tienen que llevarle dinero semanal a las cárceles.
Otras de las recomendaciones de la academia es reiniciar el abastecimiento de los colmados que funcionan dentro de las cárceles para que los prisioneros puedan comprar con el dinero que reciben alimentos, artículos de aseo y ‘pagar de forma regular los espacios donde pernoctan y otras anomalías cotidianas de esos recintos’ y mantener, dadas las actuales circunstancias, un orden mínimo y una tranquilidad relativa.
Libertad condicional. La academia aconseja que los jueces de Ejecución de la Pena ponderen el otorgar libertad condicional a cerca de dos mil internos que tienen sentencia definitiva y que han cumplido el tiempo de prisión al que fueron condenados y solo están pendientes del pago de una indemnización económica.
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