Por Luis F. Subero
El día 6 de octubre las fuerzas restauradoras ocupan el poblado de Ocoa. Fiel a su forma de actuar y pensar, el general Perico Salcedo inició una serie de desamanes en busca de acrecentar sus bienes con el pillaje.
Luperón, al enterarse en Bonao de que Perico se había unido a las fuerzas que marchaban hacia El Maniel, entendió el peligro que aquello significaba y de inmediato salió con una caballería . En el camino encontró una escolta que llevaba en calidad de prisioneros al general Modesto Diaz y a los coroneles José Valera y Demetrio Alvarez. Luperón ordenó su liberación inmediata por considerarlos hombres respetables y emparentados con familias principales del Maniel y de Baní.
Bajo un temporal llegó Luperón a Ocoa. “Inmediatamente que Perico vió llegar a Luperón mandó formar la tropa para hacerle fuego, pero Luperon que vió el movimiento y comprendió la intención de Perico, con la mayor prontitud y seguido de la caballería, armas preparadas, se le presentó a la tropa previniendo su propósito y confundiendo a Perico Salcedo, de tal modo que tuvo el tiempo necesario para impedir la catástrofe”.
Durante su estancia en Ocoa, Luperón se dedicó a restaurar el orden y a darle seguridad y confianza a la población. En casa de Vicente Casado se llevó a cabo una reunión de la que salió el juramento de obediencia y adhesión a la autoridad de Luperón. Posteriormente se marchó a Baní, dejando Ocoa en manos de los restauradores y confirmando a Casado en el puesto de Comandante de Armas.
Para ese momento, los españoles evacuaron la ciudad de Azua, reconcentrando todas sus tropas en Santo Domingo, para desde allí planificar la recuperación del Sur. El 15 de octubre las fuerzas españolas y de la reserva marcharon sobre San Cristóbal, replegándose los restauradores a Baní. Ordenó entonces Luperón a Perico Salcedo marchar a San Cristóbal, a lo que aquel se negó y se retiró sobre El Maniel, donde después de haber saqueado y cometido mil ultrajes en los poblados, se apareció en El Cibao con la mentira de que Luperón se había unido a los españoles.
Estando Luperón en Baní, llegó el General Florentino desde San Juan, con un despacho del gobierno restaurador en el que se designaba a Florentino como general en jefe del Sur, cargo que hasta entonces ejercía Luperón, y además ordenaba reducir a prisión a Luperón por haber dejado escapar al general Modesto Diaz y demás prisioneros. Luperón regresó al Cibao por el camino de El Maniel, para ponerse a disposición de su gobierno.
En defensa de Luperón, y en un gesto que lo enaltece, Vicente Casado encabezó la Comisión de Notables que mediante comunicación de fecha 15 de noviembre de 1863 daba constancia del correcto proceder de Luperón. La comunicación decía: “Vicente (alias Blanco) Casado, Comandante de Armas de esta común de San José de Ocoa, certifico: Que el día 18 del pasado octubre llegó a este pueblo el General Gregorio Luperón, y durante su corta permanencia en él, su comportamiento fue sin tacha, cual corresponde a un hombre de honor, sin que ni en general, ni en particular, ningún ciudadano haya sido inquietado por su causa.” (18).
Durante el mes de Octubre y Noviembre, las fuerzas españolas recuperaron San Cristóbal y Baní, para posteriormente ocupar Azua, San Juan y Bánica.
E l 6 de diciembre la columna al mando de La Gándara entró en Azua y desde allí envió fuerzas que junto con otras salidas de Baní, tomarían San José de Ocoa.
Vicente Casado, al saber que un gran ejército marchaba hacia Ocoa, el día 8 de diciembre escribe al Comandante Jefe del Ejército de su Majestad, Carlos Rodriguez de Rivera, en el que le expresa: “Mi deber es pues, ponerme a sus órdenes y a las del legítimo Gobierno…” Y luego agrega: “En este pueblo no hay la menor dificultad ni oposición..” y concluye expresando “los deseos de éste pueblo que no desea otra cosa que volver al seno del legítimo Gobierno de nuestra Reyna”. Estamos en presencia de un oportunista o de un sagaz y astuto político que quiso preservar su vida y evitar retaliación contra la población?. Tema para una discusión amplia, seguramente.
El día 10 de diciembre Francisco Heredia informaba haber ocupado la cuesta de Banilejo a la vez que informaba que “el infiel Vicente Casado” tenía unos 30 veganos a la cabeza del comandante Luis Pastor, quien era un español llegado a raíz de la anexión, pero que se encariñó con el país y luchó con los dominicanos en contra de su propia patria.
Entre las primeras medidas tomadas por los españoles al ocupar el poblado de Ocoa fue la de hacer prisionero a Vicente Casado y a su secretario, Juan Ramón Colón. Francisco Heredia, quien se desempeñaba como Comandante de la Reservas, ejército conformado por dominicanos que apoyaban a los españoles, estuvo a cargo de realizar la investigación sobre lo acontecido en Ocoa. A tales fines llevó a cabo interrogatorios a varias personas que testimoniaron el papel de Casado a favor de los restauradores, con lo que quedó sellado su destino. Uno de los interrogados, en una sincera demostración de honestidad dijo: ”Todos estaban dispuestos a entregarse al que más fuerzas tuviese”.
En el año 1864, en la instrucción seguida contra el general restaurador Pedro Florentino, se recogen los testimonios de algunos ocoeños. Uno de los testigos expresa que “cuando los rebeldes tomaron el Maniel, Florentino puso por Comandante de Armas a Vicente Casado..” y “fue él que mandó correo a Florentino de haberse perdido el pueblo de San José de Ocoa y que convenía asegurar bien a los presos que él había remitido, queriendo engañar a los españoles haciendo ver a las autoridades que abrazaba con gusto su causa, más todo era falso, y entonces participaba noticias a Florentino”. Otro testigo asegura que Casado “tan luego como los Españoles entraron en Maniel manifestó a las nuevas autoridades era del partido de España, pero incógnitamente participaba noticias a Florentino.
Queda, pues, dilucidada la participación de Casado. Sin dudas tenía simpatías por el bando restaurador, pero pensó que con su astucia engañaría a los españoles.
Antes de concluir, quiero resaltar un informe sobre los acontecimientos del mes de Septiembre que da cuenta de la importancia estratégica de Ocoa durante la guerra: “Efectivamente rodeado por todas partes de sierras y montañas casi inaccesibles, este punto es capaz de una fuerte defensa contra superiores fuerzas no sólo por la dificultad de los caminos casi impracticables sino también por la longitud de ellos, cubiertos asimismo de aspereza y peñascos hasta el grado de caminar un solo hombre, de frente y a pie. Además como este pueblo ocupa el centro de esta parte de la isla, tiene comunicación, aunque difícil, con los pueblos de San Juan, Azua, el Bonao, San Cristóbal, y aún el de Baní que es bastante penosa, con cuyos cinco pueblos confina este territorio. Si los enemigos lo ocupasen y quisiesen defenderlo, sería un poco difícil el arrojarlos de el, y por esta razón siempre ha estado considerado como de suma importancia y lo ha comprobado en estas circunstancias la impresión grande que ha causado en Azua y Baní, la primer noticia de que la facción se había apoderado del pueblo. Esta es una de las razones para que la autoridad recomiende eficazmente al superior Gobierno fije su atención en un punto de tanto interés como San José de Ocoa. Septiembre 29, 1863”
Concluyo este relato aquí. En otra ocasión continuaré relatando lo que sucedió durante los años 1864 y 1865, fecha en que concluye la ocupación española de la isla y en que la enseña tricolor volvió a flotar sobre las montañas ocoeñas.
14/08/2019
(1) Welles, Sumner, La Viña de Naboth, Tomo I, Págs. 159,160. Colección Bibliofilos 2000
(2) Cassá, Roberto, Historia Social y Económica de la R.D., Pág. 62, Ed. Alfa y Omega, 1992
(3) Inoa, Orlando, Historia Dominicana, Editorial Letra Gráfica, pág. 377, 2013
(4) Oficio del Comadante Armas, Jaime Vidal al Gobernador y Comandante de Armas. 1861
(5) Troncoso Sánchez, Wenceslao, El Perú y la Anexión, (Datos para la Historia Diplomática Dominicana), Revista Clío, pág. 38, 1971.
(6) Dixon Porter, David, Diario de una Misión Secreta a Santo Domingo, Reporte de El Maniel, compilación y edición Milciades Mejía, Ed Buho,2014
(7) Emilio Rodriguez Demorizi, Antecedentes de la Anexión a España, Págs.87-88, Ed. Montalvo, 1955
(8) Manuel Alexis Read, Apuntes para una historia de los orígenes de San José de Ocoa, Ed. Convite, pág. 152, 1993.
(9) Bosch, Juan, La Guerra de Restauración, Pág.8, Ed. Alfa y Omega, 2000.
(10) Bosch, Juan, Ob. Cit., pág.8
(11) Cassá, Roberto, Ob. Cit., pág. 83
(12) Bosch, Juan, Composición Social Dominicana, Ed. Alfa y Omega, pág. 278, 2005
(13) Rodriguez Demorizi, Elogio del Gobierno de la Restauración, en Ensayos sobre la Guerra Restauradora, Pág.
146, Comisión Permanente de Efémerides Patrias, 2007.
(14) Archambault, Pedro M. , Historia de la Restauración, La Librairie Technique et Economique, 1938, pág. 151.
(15) Oficio del Comandante Militar de Baní de fecha 21 de septiembre 1863
(16) Comunicación de Jaime Vidal al Capitán General de fecha 21 de septiembre 1863, AGN
(17) Bosch, Juan, Composición Social Dominicana, Ed. Alfa y Omega, pág.279
(18) Chaljub Mejía, Diccionario Biográfico de los Restauradores de la República, Colección Banreservas, 2007, pág. 63
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