Por Nóbel Mejía.-San José de Ocoa
Recientemente estuve en la rendición de las memorias 2016-2017 del senador Pedro Alegría, acto donde se proyectó un audiovisual y se entregó una revista que recoge parte de todo el accionar del legislador ocoeño, desde su oficina senatorial y la fundación que lleva su nombre.
Concluida esa actividad, debo confesar que un colega me expresó “creo se ha hecho poco”. No intercambié puntos de vista porque analizar en caliente no es mi estilo y, de hecho, no debe serlo de un comunicador que pretenda hacer un ejercicio responsable. No entraré en diatribas tales, si es mucho o poco, si llenó las expectativas o no. Creo faltan cosas por hacer pero, siendo justos, la rueda sólo lleva un año y el político que ví sentado frente a mi respira compromiso con su provincia.
Hojeando la revista y haciendo sonar el eco de las palabras de Alegría, me cautivó una serie de cosas, quizás banales para algunos o mínimas frente a todo lo que hay que hacer y justificar. Asunto último que, de hecho, es así porque hay un presupuesto o fondo que debe emplearse “correctamente” y una parte legislativa que no debe estar ahogada por asuntos sociales.
Dentro y fuera del informe, son varios puntos que me hacen ver el rostro humano de la actual gestión, lejos del tradicional politiquero que estamos acostumbrados:
-Ante una artillería de preguntas que le formulamos, el senador expresó que muchos creen que los legisladores y políticos saben de todo y no es así. Eso captó mi atención porque se aleja del discurso tradicional de la autoridad que, teniendo o no un buen manejo de la oratoria, pretende creamos tiene todas las respuestas, la situación bajo control o a “Dios cogido por el rabo”. Además, abre con ello los oídos ante sus electores.
-El senador expresó estar abierto a que nos acerquemos a él con proyectos, que lo ayudemos para lograr una mejor gestión. Ciertamente, el asunto me hizo reflexionar que cualquier ciudadano o institución puede elaborar proyectos y presentarlos a los legisladores. Críticamos pero no somos capaces o no nos interesa presentar alternativas al punto de crítica, precisamente por el asunto politiquero de cada uno a lo suyo. A veces olvidamos que, si un legislador lo hace bien, nos beneficiamos todos y, si es lo contrario, nos perjudicamos. Desde luego, debe propiciarse esos espacios de acercamiento.
-Confieso que me emocionó ver las gráficas de los envejecientes del Hogar San Antonio de Padua disfrutando un día de playa organizado por la Fundación Pedro Alegría. Para mucha gente puede resultar una tontería, sobre todo si se mide desde el punto de vista presupuestal. Lo cierto es que, para los protagonistas, ese puede ser el regalo más grande que hayan recibido en sus vidas; la sonrisa dibujada en el rostro de esa gente no tiene precio, las palabras poco o nada importan. A eso añadir que Alegría lleva mucho tiempo dando apoyo económico y celebrando fechas importantes, además de someter el edificio a reparaciones, la gestión reciente de una camioneta, entre otros.
-Pocos días despúes de la rendición, estuve en un encuentro de la Asociación Dominicana de Rehabilitación (ADR), Filial Ocoa con la prensa local. A respuesta de una pregunta formulada, la presidente Rosario Ramírez (Charo) dijo que el senador Alegría es un colaborador fiel de esa institución. Indicó que este les tiende la mano, aún cuando la ADR no lo solicita. Ese dato me pareció interesante porque no figura en la revista, hecho que me hace pensar se olvidó o el senador lo hace a título personal. En todo caso, dice mucho de su solidaridad con causas no correspondidas en su justa dimensión.
-Otro aparte que captó mi atención fue la actividad donde el senador Alegría entregó 29 bastones especiales de alta calidad a igual número de personas no videntes. Gesto que fue resaltado por la archiconocida Francina Hungría, quien estuvo presente y expresó conocer muchas personas pero “pocas con la sensibilidad humana del senador Alegría”.
-Aporte económico constante para el tratamiento de pacientes VIH/SIDA, Hospital San José.
De manera que Pedro pone asunto a sectores “olvidados”, poco o nada alcanzados por la políticas públicas: envejecientes, personas con una discapacidad y pacientes VIH.
-El poner a disposición su salario para el quehacer social a tráves de la fundación es un gesto de desprendimiento digno de imitar, sobre todo porque no está obligado y, dada su naturaleza, es dinero cuya utilidad no figura en informes oficiales. A eso se añade un aporte mensual realizado por LEIDSA y otros extras.
El resto lo dejo en manos de los analistas y opinólogos con derecho: poniendo la “caña de pescar” en manos de 19 estudiantes universitarios becados; CORAOCOA, sometimiento proyecto de ley para que Ocoa administre y se beneficie de sus aguas; gestión minibús Iglesia de Dios; donación de camión de bomberos al cuerpo correspondiente en Ocoa, así como la gestión de 500 mil pesos para construcción cuartel; dinamización de los trabajos y avances en la meta del Plan Nacional de Alfabetización; reparto de útiles escolares; premios en Carnaval de Sabana Larga; entrega de 3 patrullas motorizadas para los cuarteles policiales de Ocoa y Rancho Arriba; donativos económicos para torneos Superior de Baloncesto – ABOCOA, Liga Campesina de Béisbol, Liga de Sóftbol Sabana Larga, Club Los Halcones – Superior de Baloncesto La Ciénaga; donativo reparación acueducto en Ojo de Agua y cancha de baloncesto en TV Centro La Horma; celebración de actividades sociales en fechas importantes (día de las madres, reyes, navidad, Semana Santa, otras) y el tradicional quehacer diario (servicios varios, ayudas, patrocinios, otros); solicitudes, gestiones e intervenciones varias, entre ellas la búsqueda de solución a los agricultores de La Horma, terminación de los trabajos corredor ecológico Tramo Rancho Arriba – Sabana Larga, reforzamiento de la policia local e iluminación calles Sabana Larga y Ocoa; aportes mensuales para Escuela de Bellas Artes, Defensa Civil Ocoa, Cruz Roja, Aseuno, Asociación de Estudiantes Sabana Larga, Escuela Vocacional, AMET y Hogar Crea. Entre otros aspectos recogidos en la revista y el audiovisual.
Mucho o poco, el hombre está en lo suyo y se muestra comprometido. Esperamos que el año legislativo 2017-2018 emprenda cosas nuevas y avance lo iniciado, sobre todo que refuerce la parte propiamente legislativa y se concentre en ello, sin dejar de atender los “otros asuntos”.
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