Por Alfredo Arias.
Comúnmente en la tranquilidad de nuestro hogar, dedico cierto tiempo a escuchar música de varios géneros, como forma de equilibrar mi estado de ánimo.
Recientemente disfruté de las interpretaciones románticas de un artista que no solo trascendió al tiempo, sino que se convirtió en un ícono de su generación en los años 60, 70 y 80. Nos referimos a Julito Deschamps, fallecido en el año 1985, con apenas 55 años de vida.
Entre sus interpretaciones me detuve a escuchar con mucha atención la canción: Como duele una traición. La melodía y el contenido de sus letras, me conectaron como por arte de magia a la difícil situación, que en el orden político, están viviendo seis danilistas precandidatos a la Presidencia de la República, que, por el apoyo indiscutido que Danilo Medina le está dando a Gonzalo Castillo, de seguro que los mismos seis se estarán diciendo, como duele una traición.
Y es que, Danilo los lanzó a correr por la candidatura Presidencial por el PLD, supuestamente para que el favorito entre ellos, según encuestas, se enfrentara en la contienda interna de esa organización oficialista, al también precandidato Presidencial Leonel Fernández, quien manifiestamente está luchando electoralmente contra la maquinaria del gobierno danilista, con mayor fuerza que la llamada oposición encabezada por el PRM.
Esos seis tontos útiles, victimas del síndrome del infantilismo, y de la confianza a ciegas de su jefe político Danilo Medina, son a saber : Carlos Amarante Baret, Reinaldo Pared Pérez, Andrés Navarro, Francisco Domínguez Brito, Juan Temístocles Montás y Radamés Segura.
Pues, como es de público conocimiento, Danilo entretuvo a dichos precandidatos, en lo que se definía su clara pretención de modificar la Constitución, y así poder buscar una nueva repostulacion.
Como no lo logró, por razones muy conocidas, le anunció al país, muy adolorido, que no se presentaría nuevamente en busca de la reelección en el 2020. Acto seguido, como a la velocidad de un rayo, instruyó, bajó línea para que Gonzalo Castillo, su verdadero y único delfín lanzara lo más rápido posible sus aspiraciones Presidenciales, y desde el gobierno, sin disimulo alguno, proceder a darle todo el apoyo, como en efecto está ocurriendo.
Esa conducta desleal del Presidente, contra sus propios y cercanos compañeros, ha estremecido el danlismo, provocando hasta la fecha las primeras dos renuncias de los aspirantes a la Presidencia de ese sector, quienes aseguraron que lo hicieron por la total parcialidad y apoyo financiero del gobierno a favor del exministro de Obras Públicas Gonzalo Castillo.
En este caso, todo parece indicar que se cumplió la ensenañza Bíblica de Jeremías 17 : 5 , de que » maldito el hombre que en el hombre confía». O como lo sentenció Facundo Cabral : » Traicionar a un amigo es un acto tan inmoral, que la persona que comete tal fechoría debería no levantar la vista del suelo».
El autor es Abogado.
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