SAN JOSE DE OCOA-Los presidentes de las asociaciones de caficultores de esta provincia llevaron a cabo un encuentro este domingo en la que analizaron la situación de la caficultura en esta zona.
Durante una reunión celebrada en el Centro Comunal del Alto de Nizao, participaron 10 presidente de asociaciones de 16 que se tiene registrados en la provincia.
En el mismo elaboraron un documento en la que aprobaron varias medidas, entre ellas;
Elaboración documento para ser sometido a las asociaciones del resto del país, definir un plan de trabajo que incluye hacer rueda de prensa, entregar carta al presidente y un gran encuentro en Ocoa en abril.
Documento
La caficultura fue uno de los pilares fundamentales de la producción agrícola del país durante el siglo pasado por los múltiples beneficios económicos, sociales y ambientales que deja a la República Dominicana.
Producir café conlleva el uso de mano de obra a lo largo de la cadena, desde el cultivo, cosecha, limpieza, molienda y procesamiento industrial y comercial.
Es una fuente segura de divisas para el país porque en los mercados internacionales la demanda de café es creciente como la población por tratarse de una bebida de consumo casi universal, mientras que por tratarse de un arbusto que cubre completamente el suelo, es un factor de protección y conservación de la tierra y de las aguas circundantes.
Producir café es una práctica amigable con el medio ambiente en su totalidad.
La preponderancia de la producción de café fue bajando en el país por diversos factores, entre ellos el cambio de modelo económico, la migración campo-ciudad y eventos climáticos como huracanes y sequías.
Rescatar la producción de café es una estrategia correcta para el país porque su estimulación permitiría contribuir a revertir la deforestación en las zonas territoriales aptas para su cultivo –entre 400 y 1,000 metros sobre el nivel del mar-, conservar aguas, evitar la erosión de terrenos e inundaciones en los llanos y ciudades, así como generar empleos, transferencia de tecnología, dinamización del comercio y generación de divisas.
Para lograr la recuperación de la caficultura, es necesario un esfuerzo combinado de los caficultores, las autoridades nacionales y los técnicos del sector.
Los caficultores tenemos la voluntad de volver a ser un sector productivo relevante, moderno y dinámico, pero para ello necesitamos el concurso puntual y efectivo del Gobierno dominicano ejecutando políticas públicas que contribuyan a enfrentar las dificultades que hoy entorpecen la caficultura.
Entre las iniciativas que consideramos necesarias y urgentes para levantar la caficultura están:
Indocafé
-Fortalecer el Instituto Dominicano del Café (Indocafé) colocando bajo su responsabilidad el estímulo, seguimiento y promoción de la caficultura empleando prácticas modernas.
-Hacer del Indocafé un organismo técnico con agilidad operativa, recursos humanos, equipos y financiamiento para asistir al caficultor con calidad y cantidad. Todos los recursos dispersos de apoyo a la caficultura deben ser concentrados en Indocafé y este a su vez volcarlos efectivamente hacia las zonas cafetaleras con consistencia y puntualidad.
En concreto proponemos que el Gobierno destine los recuersos economicos necesarios durante este año para que Indocafé asista con todo tipo de apoyo a los caficultores, especialmente a los medianos y pequeños de todo el país.
Obras Públicas
Una de las dificultades insalvables del caficultor es una vez tiene la cosecha es poder colocarla en los mercados por la mala calidad de las carreteras y caminos de la zona rural.
-Es necesario que el Ministerio de Obras Públicas disponga un plan de reconstrucción de caminos y de mantenimiento de los mismos para garantizar la movilización de las personas hacia las zonas productivas y de la producción hacia los mercados urbanos.
-En concreto estamos proponiendo la reconstrucción de decenas de kilómetros de caminos carreteros en las zonas cafetaleras del país durante este año y que se programe el mantenimiento para el próximo año.
Hidroeléctricas
Como parte de una política de Responsabilidad Social Corporativa, la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID) debe disponer un fondo especial para estimular la conservación de los bosques con prácticas amigables para la conservación de agua como la caficultura.
La operación de las represas para la generación eléctrica con el agua solo es posible si en la parte alta, donde nacen los ríos y sus afluentes, así como en sus cuencas, se realizan prácticas agropecuarias conservacionistas como lo es la caficultura.
Por tanto, el gobierno debe instruir a la EGEHID para que destine un 3% de sus ingresos por venta de energía para engrosar los fondos destinados a apoyar la caficultura en forma de fondos líquidos para que el Indocafé y las asociaciones de productores establezcan viveros, compra de fertilizantes, capacitación y mantenimiento de fincas.
Ejecutando ese conjunto de acciones y políticas, gobierno y caficultores organizados podemos recuperar el sector y devolverle el esplendor de años pasados.
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