Por: José Henríquez
En estos días se ha hablado mucho de censura y de dictadura; no solo la iglesia, sino, también el doctor Leonel Fernández, el PRM y la oposición han planteado la premonición de que el Estado dominican.o camina hacia el autoritarismo o la dictadura, (lo que me parece imposible), porque los legisladores – en su derecho – podrían modificar la constitución, mediante mecanismos que ella misma establece.
Aunque tengamos opiniones diferentes, por ejemplo: yo creo que debe ser mediante un referéndum o plebiscito, votado por el pueblo soberano y que éste decida.
En cuanto a la censura, creo que hay libertad de expresión; por el contrario, cierto libertinaje que a través de las redes dañan reputaciones y hasta dañan la moral pública, pero lo que es preocupante es la autocensura generalizada en los medios de comunicación, debido a la fanatización de los comunicadores permeados por la política y/o por el prebendalismo partidista, oficial y de oposición.
Debemos recordar, que en el periodo electoral anterior, dueños de emisoras de radio y programas de televisión prohibieron que pasaran reportajes, anuncios y entrevistas de Don Carlos Castillo; lo mismo sucedió con Pedro Alegría en otros programas, coartando la libertad de expresión…
Pero ¿cómo es posible?
Esas prohibiciones, en su mayoría, fueron adoptadas o aplicadas por los mismos comunicadores o por dueños de medios, en una práctica clara de autocensura, o sea, que ellos mismos coartaron el libre acceso a la información pública, y esto debemos evitar que se repita, en el actual periodo electoral con Carlos Castillo, Félix Estrella, el PRM, Etc., porque el que niega el derecho a la palabra, niega el derecho a la información de la ciudadanía. Por eso, repito lo que dijo el filósofo Voltaire: “No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida tu derecho a decirlo”… Los comunicadores y seguidores de los candidatos deben entender que la política debe ejercerse como una ciencia, no como un ejercicio de animales salvajes.
Señores, y eso, es posible…
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