Por: Rey Gerónimo
Desde mis inicios como estudiante en la escuela santa Báez, hace ya varios años, unos 17 años para ser exactos, se habla del bienestar del que gozan los maestros, algunos afirmaban que: Los maestros eran los profesionales con más comodidades del país.
Estas aseveraciones se incrementaron cuando en el año 2012 se le fue asignado al ámbito educativo el 4% del producto interno bruto (PIB), desde entonces se han intensificado las críticas a éste sector de la sociedad, algunos van más allá, son capaces de llamar «ladrones» » ineptos» y con muchos más adjetivos peyorativos al personal docente.
En ésta ocasión quiero enseñarte la otra cara de la moneda, quiero que observes el revés del tapiz, quiero enseñarte en el ambiente hostil en el cual se desempeña el ejercicio de la enseñanza en los últimos días.
Lo primero que quiero señalar es el abuso y la irresponsabilidad del Ministerio de educación, no hablo de sectores minoristas, sino, de aquellos que aprueban leyes y presupuestos: la ley 66-97 establece que, los docentes nombrados deben ser licenciados en la carrera docente, ley que transgrede el mismo Ministerio de educación, al contratar maestros, muchos de ellos sin terminar su carrera, pagando sueldos muy por debajo del que deben devengar éstos profesionales, transgrediendo así la misma ley de educación.
Otro punto digno de resaltar es que, los estudiantes que cursan el primer siclo de secundaria, lo que hoy es 1ro 2do 3ro no pueden repetir, ósea que un niño que no tenga las competencias necesarias para pasar de curso tiene que pasar solo porque lo dice el MINERD, esto ha creado una tendencia por parte de los estudiantes al desinterés en la clase, pues dicen » como quiera paso».
Qué decir del desinterés de los padres por la educación de sus hijos, algunos maestros afirman que, la mayoría de los padres no quieren ir a las escuelas, no quieren darle seguimiento a sus hijos, piensan qué, los maestros deben educar y a la vez criar a sus hijos, un concepto errado, pues el maestro puede orientar pero, es usted como padre quien tiene el deber de inculcar valores.
Que hablar del 4% asignado a educación, algunos creen que es un oasis en medio del desierto, la piedra filosofal o como dice el argot popular » la última Coca-Cola del desierto», es cierto que hoy son construidas más escuelas que nunca, pero lo que no te cuentan es que en muchas de ellas hay carencias, muchos directores de centros deben hacer malabares para comprar material gastable llámese; tiza, hoja de maquinilla, crayones y hasta productos de limpieza, con situaciones como ésta y muchas más que no citaré por razones de prudencia debemos preguntarnos.
¿ Están los maestros viviendo sus mejores días?
¿ Son los padres responsables de la educación de sus hijos?
, ¿ A llegado el 4% donde debe llegar?
¿ Están los maestros tan cómodos como muchos afirman?
¿ Se quedó el 4% entre las manos de las altas autoridades de educación?
Estás y otras preguntas se las dejaré a criterio de su conciencia.
Comentarios...