Frank Casado
Trabajador incansable, no sólo está consagrado a su arte, sino a enseñarlo a otros. Maestro del Ministerio de Cultura en la Escuela de Bellas Artes Ramón Guerrero, en su natal Ocoa.
Creador, sobre todo, el mundo de Odonnell Casado logra el disfrute tenso de la magia que el tiempo y el espacio revelan al perpetuo hacedor. Capaz de ser y estar en medio de la tradición y la ruptura. Rebeldía constructiva. Inconforme vencedor de cualquier miedo acechante. Creyente desde su Isla, va del lienzo, la cartulina, la madera, el metal, la escultura blanda hasta la cerámica brillante.
La sociedad, en efecto, tiene necesidad de artistas, del mismo modo que tiene necesidad de científicos, técnicos, trabajadores, profesionales, así como de testigos de la fe, maestros, padres y madres, que garanticen el crecimiento de la persona y el desarrollo de la comunidad por medio de ese arte eminente que es el «arte de educar».
En el amplio panorama cultural de cada nación, los artistas tienen su propio lugar. Precisamente porque obedecen a su inspiración en la realización de obras verdaderamente válidas y bellas, no sólo enriquecen el patrimonio cultural de cada nación y de toda la humanidad, sino que prestan un servicio social cualificado en beneficio del bien común.
Esto queda demostrado en el gigantesco mural que se construye a la entrada de esta provincia.
El Nombre de San José de Ocoa en letras gigantes, montadas sobre un muro de 9 pies de alto, lugar donde se está pintando el mural en el que se muestra lo que somos y hacemos los Ocoeños en la cultura, la agricultura, el ecoturismo, lo religioso, nuestros monumentos, nuestra historia desde el Maniel de los Lorenzo y Ana Lucia Tejeda y Andrés Pimentel, básicamente, nuestra identidad.
La idea surge para promover y crear la marca provincia ecoturística, marca ciudad, marca municipio San José de Ocoa, que consiguió el visto bueno del senador Pedro Alegría, quien apadrina este proyecto con su patrimonio. La grúa para instalar las letras no tuvo costo, al igual que la pintura para el mural, porque fueron donadas por empresarios amigos del senador, quien gestionó todo eso.
El proyecto cuenta con 4 etapas; primero instalación de las letras, segundo pintura del mural, tercero la iluminación de las letras y el mural, cuarto la construcción de un parquesito/mirador y habilitación de una calle marginal al frente del letrero para los que decidan detenerse hacer fotos y compartir en el área.
Se espera también construir casetas pequeñas en el mirador, para que algunos de los comunitarios de la zona puedan tener ventas diversas como artesanía, galletas y dulces Ocoeños, camisetas souvenir con diseños del nombre de Ocoa, frutas, yanikeke, y cualquier otra cosa que entiendan les dé buena venta y sirva como sustento para ellos, que además los compromete a ser vigilantes de ese proyecto que es del pueblo.
“Tanto Juan Ernesto Guerrero (Nestico) como yo, estamos trabajando de manera voluntaria, primero porque es un proyecto mío que sólo necesitaba apoyo del costo de los materiales, o sea, que no fue algo para lo que nos contrataron, y yo me acerqué a Nestico, como excelente artista que me garantizaba un buen trabajo, por lo que le pedí me ayudara, aceptando inmediatamente porque se identificaba plenamente con el proyecto y entendemos es de gran valía para el avance del pueblo, expresó a Ocoa informativa el destacado maestro del pincel Ocoeño, Odonnell Casado.
“Tenemos ya varios meses pintando, pero ha sido lento el proceso por varias razones fundamentales; La pared es difícil porque no es lisa, sino que está llena de hoyos y prácticamente es con la técnica puntillismo que estamos pintando, donde hay que hacer degradación de los colores y dar detalles pequeños, también la lluvia en meses pasados era diaria y no permitía pintar, al extremo que un día tuvimos que pintar nuevamente cada uno un dibujo después de hecho porque la lluvia lo dañó. Otra cosa es que sólo podemos trabajar en la mañana debido a que el sol después de las 12 PM le da de frente al muro y no hay forma de trabajar bajo sol. Nos vamos cada día a las 6 AM hasta las 12 del mediodía para aprovechar la sombra, lo que representa 6 horas parado pintando. Sólo nosotros sabemos el esfuerzo que hay que hacer para lograr esto, pero al final sabemos que los resultados valdrán la pena el sacrificio”. Concluyó .
En fin, se está convirtiendo este lugar en la entrada a Ocoa, que pasaba desapercibido y que en el 2007 fue para nosotros un lugar de desastre, en un espacio para mostrar los que somos, lo que hacemos y lo que queremos como Ocoeños, porque entendemos que de cada desgracia deben surgir ideas para seguir firmes avanzando como pueblo.
Todos los artistas tienen en común la experiencia de la distancia insondable que existe entre la obra de sus manos, por lograda que sea, y la perfección fulgurante de la belleza percibida en el fervor del momento creativo: lo que logran expresar en lo que pintan, esculpen o crean es sólo un tenue reflejo del esplendor que durante unos instantes ha brillado ante los ojos de su espíritu. Cuando visites este lugar, lo comprobará.
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