Seguidor suelta veneno y pone pelo en salcocho
Por Nóbel Mejía.-San José de Ocoa
El miércoles 8 de noviembre del año pasado publiqué un artículo titulado “Félix Estrella: senador 2020-2024”. A modo de sugerencia y observación, allí establecí dos cosas: al exgobernador le conviene salir del anonimato obligado; si no se reinventa, el círculo quedará cerrado, definitivamente cerrado.
En aquellos días ví al señor Estrella en un acto de graduación universitaria, hecho que, dicho sea de paso, despertó la musa de mi pluma. Valoré aquello como una señal positiva en el sentido de que el hombre se dejaría ver con más frecuencia.
Efectivamente, el caballero apareció en la escena una vez más. En esta ocasión repartiendo juguetes en gran parte de la geografía provincial. Al parecer ha puesto asunto a mis consejos y eso es de sabios y humildes. De no ser así, concluimos se trata de coincidencias, motivación de sus asesores o cualquier otra causa.
La iniciativa está de lujo pero hay una opinión extraída de una red social que jamás debió reproducirse en nota de prensa afin. El señor Klaus Kick tiene una inquina venenosa desde hace mucho tiempo y desconocemos en que se fundamenta. Desde luego, tiene todo el derecho del mundo a expresarse y hacer considerandos. El asunto es que la reproducción de lo que dijo es innecesaria porque ayuda poco o nada a elevar el gesto estrellista. Léase la nota aquí.
Es tiempo de sobrada inteligencia emocional, cambiar odios por amores, exponerse a todas las corrientes, apostar a nuevas fórmulas y reinventarse. Para cumplir con ello, Félix Estrella debe sumar, oxigenar sus avanzadas estratégicas y mediáticas, evitar abrirse frentes innecesarios muy temprano e imprimir asesoría a otro nivel. En caso contrario será lo mismo de antes y la factura de aquellos que lo esperan en “la curvita de la paraguay” se hará más grande.
Dejad que el veneno de las redes sociales entierre a sus muertos. Bajo ninguna circunstancia se aconseja que los estrellistas vayan al juego de la resurrección. Sí, porque no hay que ser un genio para saber a quien o quienes se refiere el alemán. Dejen ese muerto tranquilo, no sea cosa que haya sido enterrado VIVO o ande vagando cual fantasma…
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