Prof. Marcos Cross
En el pasado reciente la maestra Ligia Amado Melo, se refirió a la formación de los docentes en el sistema preuniversitario en la República Dominicana, fundamentando sus declaraciones en la presión que hacen las universidades para que el Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (MESCYT), flexibilice la forma de acceso a las escuelas pedagógicas de las Universidades y de nuestros Institutos Pedagógicos Superiores, integrados en el ISODOFU, que hasta el 1993 fueron las escuelas normales que formaban maestros para la enseñanza en la educación básica. Existe la resolución 09-15 del Ministerio de Educación Superior que regula el acceso a las Universidades e Institutos para estudiar educación, la cual contempla una series de requisitos y evaluaciones, que exigen altos estándares de habilidades y conocimientos para ser aprobados y permitir su acceso e inscripción en los diferentes centros pedagógicos de estudios superiores del país.
En marzo del 2020 publicamos el libro “Sistemas Educativos por la Excelencia del Docente”, en el expresamos la necesidad de cambiar los parámetros de formación del docente dominicano para que a largo plazo con una planificación rigurosa, cambiar la percepción negativa en la formación de nuestros estudiantes. No es casualidad que el sistema educativo de nuestro país cuente con más de 100 mil docentes titulados en educación preescolar, básica y media y en todos los escenarios nacionales, regionales y mundiales ocupamos los últimos lugares. Esto no es normal, el problema está en el docente, no en los estudiantes, aunque sabemos que el sistema es culpable, porque no ha abordado con decisión firme la problemática de la educación en la República Dominicana.
Los planteamientos que plasmamos en el mencionado libro, coinciden con la maestra Ligia Amado, en que no podemos flexibilizar los controles para que los bachilleres acedan a las escuelas pedagógicas de nuestro país, por el contrario, instamos al gobierno dominicano a asumir su rol que por mandato constitucional está obligado a ofrecer educación gratuita y de calidad a nuestro pueblo. Se han realizado múltiples acciones para mejorar la calidad de la educación, pero siempre ha prevalecido la incidencia del más profundo de los males sistémicos de la educación en dominicana, la Interferencia de los políticos para colocar a sus adeptos en las aulas.
Si queremos una educación de calidad, el Ministerio de Educación Preuniversitario, debe asumir su rol y para ello, necesita tomar en sus manos, combinado con el Ministerio de Educación Superior, el control de la evaluación y selección de los mejores bachilleres del país, aplicando de manera estricta la resolución 09-15 y no dejando solo en manos de las Universidades el acceso de los interesados en estudiar pedagogía , sino que, estas inscriban en sus Escuelas Pedagogías e Institutos Superiores, los ya seleccionados por el Estado Dominicano, a través del responsable, Ministerio de Educación Preuniversitario y/o el Ministerio de Educación Superior. Es una función del Estado, reiteramos, dar educción gratuita de calidad.
En el documento “Sistemas Educativos por la Excelencia del Docente”, planteamos mayor responsabilidad para el Estado, en cuanto a la formación de los docentes preuniversitarios, llegando a expresar que estos, deben ser formados por nuestras Universidades e Institutos, pero que el Estado asuma la selección de los bachilleres y el costo total de la formación durante toda la carrera, debe asimilarlo como parte de la nómina del Ministerio, para que solo se dediquen a su formación, mientras perdure su formación académica , debe reevaluarse el curriculum de formación en las Universidades e Institutos y deben reorientar el curriculum de las materias impartidas en los diferentes niveles de la educación dominicana, adaptándolo a las tandas extendidas, además el Ministerio de Educación preuniversitario debe sistematizar la evaluación por desempeño de los docentes y hacerlo permanente, utilizando los medios tecnológicos que nos proporciona la era del conocimiento y la tecnología. Del mismo modo el Ministerio debe incentivar y motivar los docentes de excelencia educativa, una vez evaluado su desempeño. Toda motivación debe darse por la valoración positiva del sistema y especialmente de la sociedad y el entorno donde el docente se desempeña, incluyendo incentivos económicos para aquellos que superen el 80% en las evaluaciones por desempeño, realizada esta de forma automática y sistemática cada año.
En una planificación a 20 años, podemos ver resultados positivos y valorables, los cambios, la percepción y el reconocimiento de la sociedad nacional e internacional, pero no podemos pensar en hacer más de lo mismo, seguir la misma rutina y querer hacerlo en un gobierno de 4 años, debe ser una planificación consensuada con la clase política , a largo plazo y con estricto cumplimiento, algo parecido a la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo (NO.1-12), pero en educción y fundamentalmente en la formación de los docentes. La sustitución de los maestros del presente, debe hacerse de forma sistemática al cumplimento de su edad cronológica y mediante el uso de la evaluación por desempeño, para que los nuevos maestros, formados para la excelencia educativa, sustituyan a los que deben salir por edad cronológica, hasta lograr la meta de una educación de excelencia y lograr un Pais plenamente desarrollado.
Comentarios...